A medida que pasa el tiempo, el ahorrar en la compra de ropa para tus niños es cada vez más chica. Fue tan solo hace un par de meses que compraste ese hermoso conjuntito de pantalón y camisa, pero ya no les va. Es que ellos aumentan de talla muy rápidamente, especialmente cuanto más pequeños.
En las siguientes líneas, te daremos unos consejos para realizar esta tarea tan relajante y agradable, pero a la vez estresante porque es de nunca acabar, como lo es adquirir la vestimenta de tus niños. Estos consejos se centran en el ahorro, factor fundamental en este momento.
¿Lujo o durabilidad?
Sin lugar a dudas, la etapa en que se encuentran es fundamental al momento de efectuar estas compras. Si es menor de dos años, entonces no es necesario preocuparse por la calidad de la ropa, ya que crece muy rápidamente y en poco tiempo le queda chica y en muchas ocasiones ni siquiera llega a usarla un par de veces.
Después de los 24 meses de edad, las cosas cambian porque no crecen tan rápidamente y ya han comenzado a ser muy activos. Esto te obliga a buscar ropa de mejor calidad. La renovación constante no es algo necesario en esta etapa y sí lo es encontrar ropa que dure.
Dar y recibir ropa. Lo que hacen muchas familias y amigos es regalar la ropa que ya no les queda a sus hijos. Acepta esto ya que no es ofensivo, tampoco se debe tomar como caridad. Lo mismo puedes hacer tú con la ropa que no le queda a tus hijos. De esta manera, estás ahorrando significativamente y a su vez también estás ayudando a que otros ahorren.
Visita tiendas ‘second hand’. En ellas, podrás encontrar ropa que aún está en muy buen estado y es de buen gusto, pero con un costo significativamente menor al de las tiendas normales.
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