Negociar una deuda no es fácil pero tampoco imposible. Los acreedores y los cobradores son los primeros en recordarte que tu deuda seguirá aumentando si no haces nada. Entonces, ¿por qué no comenzar a negociarla? La balanza puede estar de tu lado si sigues estos tácticas para negociar tus deudas
Da el primer paso
La comunicación es muy importante por eso es recomendable que te acerques a tus acreedores. Hazle saber sobre tu situación financiera y el interés que tienes de pagar la deuda. No ignores la correspondencia que te envían y mucho menos la tires a la basura.
Haz un presupuesto
Es necesario que hagas un presupuesto mensual sobre tus ingresos y gastos, con el fin de informar a tus acreedores sobre tu estado financiero. De esta manera, ellos podrán estimar y determinar cuánto es lo que puedes pagar en caso de llegar a un acuerdo.
Conoce tus derechos como consumidor
Infórmate y prepárate antes de negociar con tus acreedores. Asegúrate de conocer tus derechos. Puedes buscar más información en el FDCPA (Fair Debt Collection Practices Act). El FDCPA es una ley federal que protege a los consumidores contra las prácticas de cobranza injustas y abusivas. Gracias a esta ley, tienes el derecho de disputar una deuda y controlar la manera y el momento en que un cobrador de deudas puede contactarte y lo que te puede decir. Además, te da el derecho de obligar a los cobradores de deudas a que te dejen de hostigar.
No dejes que te presionen
Si el acreedor o la agencia de cobranza te envían una carta con una oferta, no la aceptes. Según varios estudios recientes los consumidores pueden resolver con éxito la mayoría de las deudas y lograr bajarlas hasta en un 50 y 70%.
Negocia tus deudas con los saldos más bajos primero
Una forma de comenzar a negociar es considerar primero las deudas con los saldos más bajos. No ofrezcas nada que no puedas cumplir. Es mejor ser honesto, así tus acreedores estarán más dispuestos a hacer un arreglo de pago.
Leave a Reply